FATUM

Ese hombre que duerme
en el pasillo de ese portal
embozado en un saco de montaña

¿Fue dueño de su destino?
¿Es dueño más ahora
de su mortandad?

¿Cuándo dejó de importarle
a los que le miramos
lo que sucederle pudiera?

Cuando muera,
¿quién le llorará?

Ese millonario
de las camisetas los polos
y los tejanos
que todo el mundo sabe
dónde vive y cómo es su casa
¿Cuándo dejó de ser el que era?
¿Cuándo quiso ser el que es?

Ahora que es quien quiso ser
¿ Quién le puede pedir
acaso
que no sea
lo que hoy ha logrado ser?

Cuando muera
¿quién a su vera
le llorará sincero
como al vagabundo
al pasar?

Ese hombre que contempla
al vagabundo dormitar,
la puerta de la mansión
del millonario envidiado

por todos al pasar
retorna a casa pensando:
fui un punto medio
observando dos extremos
en silencio
palpitando
boqueando el pez
fuera del agua
su fatum
al agonizar

Si ser hombre
es ser esto
ciego cual Edipo
me quiero quedar

¿A los humanos
quién nos habrá de llorar?

Roberto Iglesias