Me visitan
Me visitan palomas negras
se detienen en el solado de mis patios,
me miran agazapadas, hojas de su Jobo,
y me enseñan sus mascaras blancas.
Se posan,
como un asterisco excesivo y despeinado
en la punta de la hierba,
y como colibríes
se atrapan en una foto huidiza,
oliendo la salud de la flor del verde Nomi.
Hay palomas detenidas
en la cara de mi padre,
en sus arrugas infinitas,
sorprendida en su cuello vaciado
con su viejo dolor, ya muerto.
Hoy, ella y las palomas negras me visitan.
Facebook: Martín Abreu
Eso de ‘como un asterisco excesivo y despeinado en la punta de la hierba’ es bestial. Un poema precioso.
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