Latinajos y demás inventos
Un artículo de Sasa Sosa
Hoy quiero confesar…que estaba equivocada. He descubierto que llevo toda la vida utilizando una expresión que creía culta y resulta que ni siquiera es un vulgarismo, simplemente es un invento: a voz de pronto, una expresión que para mí significaba –algo que se hace con rapidez. Pues resulta que no existe tal expresión y que mi cultismo era una estupidez, un cretinismo, para decirlo finamente y de paso ir borrando la huella de tremenda mamarrachada. Imposible describir la vergüenza que sentí cuando descubrí el engaño, cuando imaginé la de veces que la utilicé, aunque sospecho que ante personas que tampoco sabían que en realidad no estaba diciendo nada; eso, o es que se callaban para no dejarme en ridículo. Gracias a todos ellos por dar rienda suelta a mi ignorancia.
Resulta que la expresión correcta es a bote pronto (Diccionario Panhispánico de dudas), locución que procede del mundo del deporte (fútbol o tenis) y que significa “golpeando la pelota justo después de que haya botado”. Del lenguaje deportivo ha pasado a la lengua general con el significado de “sobre la marcha o improvisadamente”. ¿De dónde me saqué la expresión?, no tengo ni idea, pero así, a bote pronto, deduzco que la confusión puede provenir de una mala vocalización en el otro o de un oído sordo en mi.
Como la cosa hoy va de sacar la ropa sucia, no quiero olvidarme de otra expresión que durante toda la carrera utilicé incorrectamente; yo y toda mi promoción. Se trata de una locución que estaba muy de moda en la Universidad de Filosofía, época en la que nos lanzábamos como locos a llenarnos la boca con latinajos que hacían parecer nuestras intervenciones mucho más profundas y complejas, cuando en realidad, la mayoría de nosotros, impúberes de pensamiento, no teníamos verdadera conciencia de lo que estábamos diciendo: la susodicha es “a grosso modo” (buscador urgente de dudas fundación BBVA –grosso modo–), que significa algo así como aproximadamente o a grandes rasgos y que no lleva esa “a” que probablemente ha surgido de la similitud que tiene con expresiones castellanas de significado parecido, como “a ojo de buen cubero” o “a bulto”, en las que sí es correcto su uso.
Debe, además, usarse siempre en cursiva o «entre comillas«, siguiendo las normas de escritura de latinismos y extranjerismos establecidas por la Real Academia Española de la Lengua. Grosso modo, esta es la explicación.
Por el mismo camino llega otro latinajo que hemos reinventado a nuestro antojo, de motu propio, y que he usado infinidad de veces creyéndome superbienhablada. Significa “por propia iniciativa” (RAE) y se emplea para indicar que se hace algo de forma espontánea. Pues resulta que ni lleva preposición ni es propio. Caemos otra vez en la redundancia que supone el uso de la preposición delante de un ablativo, pues ésta ya viene en la traducción. Pero como eso no nos parece suficiente decimos “propio” como indicando una cuestión propia, personal, traduciendo así directamente una parte de la locución, aunque haciéndolo mal. Porque el ablativo del que hablamos es “proprio”, y la expresión correcta “motu proprio” (buscador urgente de dudas fundación BBVA –motu proprio-) (ahora pídele a tu cerebro que te deje leer esa “r” que sigue empecinado en olvidar (p-r-o-p-r-i-o); yo no puedo ni pronunciarlo sin que se me trabe la lengua; habrá que practicar para no quedar en vergüenza, o lo que suelo hacer en estos casos, buscar un sinónimo que me saque del atolladero dignamente.
También es bueno saber que motu proprio puede ser un sustantivo: un motu proprio es un documento (la promulgación de una ley particular) de la Iglesia Católica emanado directamente del Papa, por su propia iniciativa y autoridad.
Soy muy consciente de que ésta pólvora lleva mucho tiempo descubierta, pero yo ya no practico el sentido del ridículo, al menos en lo que se refiere a asumir las limitaciones propias. Fin del misterio.
Facebook: Sasa Sosa
Esa frase «a bote pronto» se la escuché por primera vez a alguien cuando yo tenía 17 añitos. Se le iluminaban sus ojos verdes al hablar, y la utilizaba con frecuencia. Me encantaba escuchar sus relatos…y muchas frases las comenzaba así cuando le hacía alguna pregunta —siempre he preguntado mucho—. Ha sido un gran placer leer este artículo. Genial. Te felicito.
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¡Gracias por tu comentario! Por lo que veo, el invento de la expresión es mío y solo mío… ¡sin pudores! que reconocer mi ignorancia es un pasito más hacia la sabiduría. Besos!
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Muy interesante Sasa.
La verdad que la única que he utilizado correctamente durante mi vida es «a bote pronto» y gracias a una de mis hermanas, que es profesora e insistía mucho en corregir a todo el que podía.
Contigo siempre se aprende algo nuevo.
Mil gracias.
Un abrazo
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¡Gracias por leerme! Procuraré seguir evidenciando mi ignorancia, así aprendo yo e igual también ayudo a alguien. ¡Besos!
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[…] via LA LUPA – Latinajos y demás inventos — palabrayverso […]
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«Lo siento mi amor, pero hoy te lo voy a decir, hace tiempo…» que siento ganas de volver a leerte, porque me diviertes, porque enseñas y porque refrescas, así que he decidido dejarme llevar por tus consejos latinistas»como una ola». Besos, grandeee.
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Jejejeje!! ¿Todo eso hago? Pues nada, a seguir trabajando. ¡Gracias por todo chiquilla!
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