Preikestolen

Yo: No me miren, no me miren, no me miren…
El típico aguafiestas: Pero… ¿Qué hace usted ahí, al borde del acantilado?
Yo: Esto es Noruega, amigo mío, ¿En qué otro lugar del mundo podría un pájaro aprender mejor a volar?
El típico aguafiestas: Ya.
Entonces, saltó.