Partidas
Llegué a tantos lugares
Sin que nadie me esperara
Ni un rostro conocido en la parada
Seres ignotos en el aeropuerto
Ninguno en el andén para abrazarme,
¿Por qué esta llegada sería más piadosa?
También partí tantas veces sin despedidas
Estaciones de trenes vacías
Paradas de autobuses a oscuras
Titilación mortecina de muelles
Aeropuertos desolados
¿Por qué la última sería más fecunda?
Facebook: Rubén Mettini
Viajero de incógnito, sigue viajando y sigue escribiendo en pasajes desconocidos. Felicidades, ánimo, dede Londres, Andrea Molina
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Lejanos y cercanos yoes. …singulares. ..únicos. ..sin iguales. …como sueños. ..como reales. …¿quién sabe? …nadie. ..y todos. ..
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Gracias, Andrea. Tú que has viajado habrás sentido esa sensación que dan los aeropuertos al caer la noche o las estaciones de tren cuando ya no hay trenes. Feliz estada en Londres, una ciudad que amo y donde siempre me siento como en casa.
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Y los ojos buscan y buscan…..aunque sepas que no hay nadie, sintiendo el frio aun cuando haya calor.
Me encanta ….
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Es así, Marisa Garcia. Inevitablemente, cuando se abren las puertas en el aeropuerto, y uno ve tanta gente esperando a otra gente, uno se figura que habrá alguien, mira y mira, cara por cara, y no hay nadie.
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La soledad del viajero impenitente. Uno va, uno viene, uno busca, se busca, aquí y allá. Y a veces se encuentra. El propio viaje es la casa. Solo. Pero libre. Pero solo. Todo esto me inspiran estos versos. Muy sugerentes, Rubén.
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La imagen retrata a la perfección el espíritu melancólico del viajero frecuente, tan bien transmitido en estos versos. Así lo sentí, aunque yo, de viajar…casi nada. Saludos Rubén.
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Gracias, Amaliaquiroz, por tu comentario. Aquí o allá ya nos veremos. Besos.
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