TE RECOMENDAMOS… “Anturios en el salón” de Juan Ramón Tramunt


Anturios en el salón” de Juan Ramón Tramunt

Una reseña de Margarita Otero Solloso

¿Te imaginas que por cualquier desastre natural o humano tuvieras que ser evacuado de tu casa y permitiéndote coger tan solo un petate, te llevasen a más de 3000 kilómetros de ella? ¿Te visualizas regresando años después a lo que fue tu hogar, ahora desierto y sin ningún habitante «legal» en tu ciudad, controlada tan solo por un equipo de militares que te dejan allí a tu suerte? Reflexiona cómo sería vivir allí, solo, sin suministros de agua o electricidad, sin supermercados, sin farmacias ni atención sanitaria, teniendo que subsistir por ti mismo.

Esta es la intrigante premisa del argumento de la novela «Anturios en el salón» de Juan R. Tramunt. Un thriller que con un elenco mínimo de personajes en escena y el protagonista, como narrador a su vez, ocupando el 95% del tiempo, es capaz de mantener al lector completamente inmerso en el relato y conseguir que empatice con él pensando en lo que haría o no en una situación similar. Al menos así me sentí yo al ir avanzando en la historia que Juan Ramón nos va desplegando en las hojas con maestría.

El escenario elegido para el desarrollo de la trama es Canarias, lo que le da un toque de cercanía a quiénes vivimos aquí y reconocemos nombres, lugares y descripciones del entorno. Evitaré dar detalles que pudieran arruinar la experiencia de desvelar por sí mismos los sucesos que acontecen. No les contaré el por qué fueron evacuados, ni el cómo y por qué llega a la isla de nuevo su personaje central y mucho menos si consigue o no sobrevivir en una urbe hostil y primaria. Solo diré que es una novela que te hace reflexionar sobre lo dependientes que somos del sistema, sobre que posiblemente nos hemos vuelto inútiles para subsistir, acostumbrados a que nos lo den todo hecho y a tanta tecnología que nos facilita todo. Y que está muy claro que la naturaleza puede vivir sin nosotros, pero nosotros sin ella no.

Nos encontramos ante unos hechos de ficción que fácilmente podrían convertirse en realidad por muchas causas. La más reciente, la que vivimos con el volcán de La Palma, o la última ocurrida con la Dana de Valencia, demostró lo poco que estamos preparados para los cataclismos y lo lejos que vemos el dolor de perderlo todo aun estando tan cerca ¡Ojalá que nunca tengamos que abandonar lo que amamos, al menos por la fuerza! Son muchos los seres humanos que por guerras o catástrofes se ven obligados a ello y siempre pensamos que las desgracias son esas cosas que solo les ocurren a los otros. Somos vulnerables y frágiles y mucho más al ser isleños, debido a ese mar que nos abraza y al mismo tiempo nos aísla, o por ser punto geográfico y crítico de interés.

Juan Ramón Tramunt Rubió, autor de la obra, Psicólogo clínico y, por tanto, con amplia experiencia en las emociones humanas, trata de mostrar esa fragilidad del ser con sus ilusiones, sus miedos y sus propias contradicciones; y a su vez, la de las islas al depender de las importaciones y el turismo, entre otras cosas, como las de que nuestra juventud ha abandonado el campo.  El propio título de la obra toma mayor significado al leerla, al ser una planta que muere sin la atención de su cuidador. Nuestros gobiernos debieran estar bien preparados para la autosuficiencia y nosotros también, pero hemos elegido la comodidad de las gaviotas que esperan a comer los restos del pescado en el puerto o la del gato que ya no necesita cazar y duerme todo el día en un esponjoso cojín. Y hasta a ellos les costaría sobrevivir sin la ayuda humana. ¿En qué se convertirían esas mascotas domesticadas al verse solas en la naturaleza? Adéntrate en las páginas de este libro si quieres descubrir todo ello. Un guion escrito en 2016, editado por ediciones Baile del Sol, que para mí debería haber sido llevado a la gran pantalla, y que estimo que sin grandes recursos podría realizarse. Empero, un solosi digo: el protagonista debería ser tan gran actor como lo ha sido el escritor para conseguir lo que su mano logra: mantener al espectador interesado hasta el final. Podría ser una muy buena película canaria. ¡Atentos productores!

Margarita Otero Solloso

Un comentario

  1. Juan Ramón Tramunt, hombre altísimo de estatura, pero humilde también, es un escritor que se ha ido fraguando poco a poco. También hombre de teatro, una pena que no le hayan dado más oportunidades escénicas. Tiene el defecto de no presumir, pero siempre está ahí

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