Manuel Díaz Martínez – En verdad os digo

En verdad os digo

El problema
fundamental
de las revoluciones
es igual
al de la Pureza:
tienen
vocación de esfinge.

De ahí que
Pureza
y revoluciones
acaben
heraclitanamente
en la cuneta.

Pastores,
no debéis
echar al campo
las ovejas
inmortales
ni los corderos
inmutables
mientras no sea
enjaulada
la dialéctica.
Digo yo

 

Manuel Díaz Martínez

 

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