FOTO-RELATO El regalo

El regalo

Te regalo mi tiempo y mi energía. Mis brazos envuelven tu cuerpo como si llevara entre ellos el más preciado tesoro.

El reloj de la iglesia anuncia las ocho y la tarde se torna en noche.

Fuera, las farolas, una a una, se encienden caprichosas y su luz, tenue, entra a través de los cristales junto al sonido de las gotas de lluvia que comienzan a caer sobre los adoquines.

Te regalo mi cariño mientras te acompaño a la cama y tú, casi a punto de cerrar tus claros ojos, esbozas una sonrisa que esconde palabras que no sabes pronunciar.

Te acompaño y deposito tu frágil cuerpo, cubriéndolo con una desgastada colcha.

Carmen Quesada

Beso tu frente y recuerdo aquellas noches en la que tú, madre, me arropabas y me regalabas tu tiempo mientras me leías un cuento.

Deja un comentario