La calle de los Conejos, de Martina Villar.

“La calle de los Conejos” (Mercurio Editorial. 2017), se desarrolla En La ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, más concretamente en la Calle Alvareda. Tanto fuera como dentro de los edificios que la flanquean. Los protagonistas que interactúan viven, se relacionan, aman, odian, sufren, luchan en ella y por ella. Además de las zonas aledañas, Zona Puerto, Isleta, etc. “la calle más contaminada de la ciudad”, según se asevera en la novela.

Los personajes, tanto miembros de una misma familia como amigos y vecinos, reflejan el egoísmo, el despotismo, prejuicios, perjuicios y la diferencia de caracteres a la hora de enfrentarse a las situaciones y circunstancias que plantea la vida; por ende a sus propios demonios interiores, dudas y miedos.

Diálogos, reflexiones, denuncias de la situación social. La vida reducida a números en las estadísticas, la mezcla de individuos reales con personajes de ficción; así como la aceptación de sí mismos, junto al amor y el humor, conforman la historia de esta calle.

“La calle de los Conejos” es un texto lleno de acción; corta en extensión, pero intensa en contenido. Una acción cotidiana y frenética, con un lenguaje cercano, incluso en alguna ocasión, (la consecución de los diálogos lo requiere), soez. Como la vida misma.

Olivia Falcón